Si de algo puede presumir la capital de Hungría es de poseer un
elenco importante, no sólo a nivel nacional sino también internacional,
de edificios de gran importancia histórica.
Si damos un paseo por el Parque de la Ciudad, nos tropezamos con uno de
ellos que, aunque no tiene una edad muy antigua, si pertenece a los más
interesantes. Conozcamos el castillo de Vajdahunyad.
Este castillo se construyó entre finales del siglo XIX y principios del XX,
levantado, inicialmente, en madera y cartón para la exposición
universal de 1896. Su éxito en dicha exposición hizo que se construyera
uno en material original de los mismos, es decir, con piedra y ladrillo,
dando lugar al que se conoce hoy en día.
El castillo de Vajdahunyad es, en gran parte, una copia del castillo del
mismo nombre que se encuentra situado en la localidad de Transilvania,
en Rumanía. Sin embargo, esta edificación de Budapest consiguió
aglomerar varios estilos arquitectónicos entre sus muros e interiores,
lo cual muestra la evolución de la arquitectura húngara a través de los años.
Detalles que encontramos en el castillo son, por ejemplo, la famosa estatua llamada Anónimo.
Esta estatua representa, en los aledaños del castillo, a un cronista
del siglo XII que fue el autor de los primeros libros sobre la historia
de Hungría, desde la antigüedad, basándose, sobre todo, en leyendas. La
tradición dice que, tocar el lápiz que sostiene en su mano, trae buena
suerte.
De nuevo Budapest nos deja huella con otra impresionante edificación que
nos traslada a la historia del país en varios ámbitos. No pueden dejar
de visitar este castillo, situado en el Parque de la Ciudad y disfrutar
de los eventos y actividades que nos permite apreciar en él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario